Erosión Dental Ácida: El Enemigo Silencioso de Tu Sonrisa

erosion dental

¿Alguna vez has sentido sensibilidad al tomar bebidas frías o calientes? ¿Notas que tus dientes se ven más amarillos o translúcidos? Es posible que estés experimentando erosión dental ácida, un problema cada vez más común en entornos urbanos como Barcelona.

¿Qué es la erosión dental ácida?

La erosión dental ácida es la pérdida progresiva del esmalte dental debido a la exposición frecuente a ácidos, ya sea por la dieta o por factores internos como el reflujo gástrico. A diferencia de la caries, que es causada por bacterias, la erosión ácida es un proceso químico que desgasta la superficie dental.

Causas comunes de la erosión dental ácida

  • Consumo excesivo de bebidas ácidas: refrescos, zumos cítricos, bebidas energéticas.
  • Alimentos ácidos: frutas cítricas, vinagre, encurtidos.
  • Reflujo gastroesofágico: el ácido del estómago puede llegar a la boca y dañar el esmalte.
  • Trastornos alimenticios: el vómito frecuente expone los dientes al ácido gástrico.
  • Uso excesivo de enjuagues bucales ácidos: algunos productos pueden tener un pH bajo que contribuye a la erosión.

¿Cómo identificar la erosión dental?

Los síntomas pueden incluir:

  1. Sensibilidad dental: especialmente al consumir alimentos o bebidas frías, calientes o dulces.
  2. Decoloración: los dientes pueden volverse más amarillos debido a la exposición de la dentina.
  3. Transparencia: los bordes de los dientes frontales pueden volverse translúcidos.
  4. Forma redondeada: los dientes pueden perder su forma original y volverse más redondeados.
  5. Grietas o fracturas: el esmalte debilitado puede provocar pequeñas fracturas.

Prevención y tratamiento en Barcelona

Medidas preventivas

  • Reducir el consumo de alimentos y bebidas ácidas: limitar la ingesta de refrescos y cítricos.
  • Usar pajitas: al beber líquidos ácidos, para minimizar el contacto con los dientes.
  • Enjuagar con agua: después de consumir alimentos ácidos, para neutralizar el pH.
  • Esperar antes de cepillarse: al menos 30 minutos después de consumir ácidos, para evitar dañar el esmalte debilitado.
  • Usar pasta dental con flúor: fortalece el esmalte y ayuda a remineralizarlo.

Tratamientos disponibles en CDZ Barcelona

En nuestra clínica dental en Barcelona, ofrecemos soluciones personalizadas para tratar la erosión dental ácida:

Aplicación de flúor

Tratamientos profesionales con flúor para fortalecer el esmalte y reducir la sensibilidad.

Carillas dentales

Restauraciones estéticas que protegen la superficie dental y mejoran la apariencia.

Coronas dentales

En casos severos, las coronas pueden restaurar la función y estética del diente dañado.

Educación y seguimiento

Asesoramiento personalizado sobre hábitos alimenticios y de higiene para prevenir la progresión de la erosión.

Importancia de un diagnóstico temprano

Detectar la erosión dental en sus etapas iniciales es clave para evitar daños permanentes. Recomendamos visitas regulares al dentista para monitorear la salud bucodental y aplicar medidas preventivas a tiempo.

El síndrome del diente fisurado: cuando el dolor dental se esconde a simple vista

diente fisurado

¿Notas un dolor intermitente al masticar pero tu dentista no ve nada en la radiografía? ¿Te han dicho que todo está “bien”, pero tú sientes que algo no encaja al morder? Puede que estés lidiando con uno de los problemas más escurridizos en odontología: el síndrome del diente fisurado.

Aunque poco conocido entre los pacientes, este trastorno es más común de lo que parece y puede llegar a ser desesperante si no se diagnostica a tiempo. En este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre este problema, cómo afecta tu calidad de vida y por qué es importante acudir a una clínica de confianza en Barcelona para abordarlo adecuadamente.


¿Qué es el síndrome del diente fisurado?

El síndrome del diente fisurado —también llamado “diente agrietado”— es una fractura incompleta en un diente que suele pasar desapercibida en radiografías convencionales. A diferencia de un diente roto en su totalidad, aquí la grieta es tan fina que puede ser invisible a simple vista, pero lo suficientemente profunda como para generar dolor, sensibilidad e incluso daños en la pulpa dental.

¿Por qué este síndrome pasa desapercibido?

H3. Dolor errático, síntomas engañosos

A diferencia de una caries o una infección clara, el dolor en estos casos no es constante, sino que aparece al morder ciertos alimentos, al tomar bebidas frías o calientes, o incluso al apretar los dientes mientras dormimos. Este patrón errático hace que muchos pacientes lo ignoren o crean que es algo pasajero.

H3. Diagnóstico complejo y frustrante

Las fisuras suelen ser demasiado finas para aparecer en radiografías, especialmente si están en dientes posteriores o cubiertas por coronas. Por eso, es frecuente que los pacientes pasen de clínica en clínica sin un diagnóstico claro. En algunas ocasiones, el diagnóstico se confirma sólo tras la exploración con lupas aumentadas, pruebas de mordida específicas o con tecnología como la transiluminación.

Causas del síndrome del diente fisurado

H3. Hábito de apretar o rechinar los dientes (bruxismo)

El bruxismo es uno de los factores más comunes que lleva a la aparición de estas microfracturas. La presión constante, sobre todo por la noche, genera pequeñas grietas en los molares que con el tiempo se profundizan.

H3. Empastes antiguos o grandes

Los dientes que han sido tratados con empastes de gran tamaño pueden volverse más frágiles con los años. Las fisuras pueden aparecer justo en las zonas donde el tejido dental se une con el material restaurador, debilitando la estructura.

H3. Cambios térmicos extremos

Beber café caliente y luego tomar agua fría, o comer alimentos congelados y luego calentar la boca con algo tibio, puede producir microexpansiones y contracciones que favorecen la aparición de grietas.

H3. Maloclusiones o fuerzas masticatorias desiguales

Cuando los dientes no encajan bien, hay sectores que reciben más presión que otros, generando un estrés excesivo que favorece la fisuración.

¿Cuáles son los síntomas más frecuentes?

Aunque pueden variar, estos son los signos más habituales que pueden indicar un diente fisurado:

H4. Dolor al masticar ciertos alimentos

En especial cosas duras como frutos secos, pan tostado o carne fibrosa. El dolor aparece al soltar la mordida, no al ejercer presión.

H4. Sensibilidad térmica localizada

Las bebidas frías, calientes o incluso el aire frío al hablar pueden generar una molestia punzante en un solo diente.

H4. Dolor que no se mantiene constante

A diferencia de una caries o una pulpitis, aquí el dolor aparece de forma intermitente y muchas veces sin inflamación visible.

H4. Sensación de que algo “cruje” o molesta al morder

Algunos pacientes describen la sensación de que un diente “no encaja bien” o “se mueve” al cerrar la boca.

H4. Encías inflamadas en ausencia de infección visible

En casos más avanzados, la grieta puede haber alcanzado el periodonto, generando molestias en la encía adyacente.

Diagnóstico en consulta: ¿cómo se detecta?

H3. Exploración clínica detallada

El dentista realiza una inspección meticulosa del diente sospechoso, muchas veces usando lupas o microscopios dentales.

H3. Prueba de mordida

Se utiliza una pieza plástica (como la «Tooth Slooth») que el paciente debe morder. Si el dolor se reproduce al soltar la presión, es un indicio claro de fisura.

H3. Transiluminación

Consiste en dirigir una fuente de luz especial hacia el diente para observar si la luz se interrumpe por la presencia de una fisura.

H3. Tinte revelador

En algunos casos se aplica un colorante específico que permite visualizar la grieta.

H2. ¿Cuál es el tratamiento para un diente fisurado?

H3. 1. Sellado con resina compuesta

Si la fisura es superficial y no ha comprometido la pulpa, puede sellarse con un composite que estabiliza la zona y previene que la grieta avance.

H3. 2. Colocación de una corona

En fisuras más profundas pero que no afectan al nervio, se puede cubrir todo el diente con una corona de cerámica o zirconio para redistribuir las fuerzas y evitar fracturas.

H3. 3. Endodoncia + corona

Si la fisura ha llegado a la pulpa, es necesario realizar una endodoncia (tratamiento de conductos) antes de cubrir el diente con una corona.

H3. 4. Extracción del diente

En casos muy avanzados, donde la grieta ha alcanzado la raíz verticalmente, la única solución viable puede ser la extracción del diente.

¿Qué pasa si no se trata un diente fisurado?

H4. Infección pulpar

Una grieta no tratada puede ser la vía de entrada para bacterias que terminan infectando la pulpa dental.

H4. Abscesos y fístulas

En etapas más avanzadas, la infección puede extenderse al hueso, generando abscesos dolorosos y la necesidad de antibióticos y tratamientos invasivos.

H4. Pérdida del diente

Una fisura que compromete la raíz puede hacer que el diente no sea viable y deba ser extraído.

H4. Dolor crónico y debilitante

El dolor intermitente que no se identifica puede afectar la calidad de vida y generar ansiedad en el paciente.

¿Se pueden prevenir las fisuras dentales?

H3. 1. Protección contra el bruxismo

Usar una férula de descarga nocturna si se sospecha de apretamiento dental.

H3. 2. Revisiones periódicas

Una detección temprana puede salvar un diente que comienza a mostrar signos de fisura.

H3. 3. Restauraciones bien ajustadas

Evitar empastes sobredimensionados o coronas mal ajustadas que generen tensión innecesaria en los dientes.

H3. 4. Evitar morder objetos duros

Como hielo, huesos o bolígrafos, que pueden generar microfracturas con el tiempo.

H3. 5. Equilibrar la mordida

Un ajuste oclusal puede ser clave para que los dientes trabajen de forma uniforme y se distribuyan bien las fuerzas masticatorias.

¿Dónde tratar el síndrome del diente fisurado en Barcelona?

En Barcelona, clínicas especializadas como CDZ cuentan con el equipamiento, el enfoque multidisciplinar y la experiencia para diagnosticar y tratar este problema con la precisión que requiere.

El síndrome del diente fisurado no es fácil de detectar ni de tratar, pero con la atención adecuada, es posible recuperar la funcionalidad del diente y evitar complicaciones graves.

Salud oral en la tercera edad

Salud oral, tratamiento en la tercera edad

A medida que vamos cumpliendo años, nuestro cuerpo va cambiando y en muchos casos es posible que debamos enfrentarnos a ciertas alteraciones en nuestra salud bucal, aunque nos cepillemos los dientes con regularidad. El uso de prótesis dentales, el tomar medicamentos y los trastornos generales de la salud suelen ser comunes en edades más avanzadas, pudiendo causar ciertas patologías orales como las que te explicamos hoy.
 

Patologías orales más frecuentes en la tercera edad

 

  • Caries en la raíz, ya que a menudo las encías se retraen y dejan la raíz expuesta con riesgo de padecer caries.
  • Pérdida dentaria, debida a caries y sobretodo a enfermedad periodontal.
  • Sequedad bucal, ya que algunos medicamentos y enfermedades de los mayores producen reducción de saliva.
  • Hongos orales, por un bajada de las defensas, medicamentos u otras enfermedades.
  • Estomatitis, la inflamación causada normalmente por las prótesis mal ajustadas o por falta de una higiene adecuada.
  • Cáncer oral, ya que el riesgo aumenta con la edad. Es muy importante visitar al dentista ante la más mínima duda.

 

Enfermedad periodontal

 
Conforme pasan los años, está demostrado que aumenta el riesgo de padecer una enfermedad periodontal. Por eso es importante visitar a tu dentista periódicamente. Estos son los signos más comunes de alarma de esta enfermedad:

  • Sangrado de encías durante el cepillado.
  • Encías retraídas del diente, se observa una parte de la raíz.
  • Movilidad en los dientes.
  • Cambios en la forma de ocluir los dientes o desajuste de la prótesis.
  • Mal aliento constante, y/o mal sabor de boca.

 

Si ves que sufres alguno de estos signos, acude a tu clínica dental de inmediato para que podamos ayudarte lo antes posible. Nos encontrarás en Carrer de Mandri 63, Barcelona. ¡Estaremos encantados de recibirte sea cual sea tu problema!