La pérdida de estrógenos que se produce en la mujer durante la etapa de menopausia provoca graves alteraciones en el funcionamiento interno de gran parte de los órganos de la misma, a la vez que cambios hormonales que afectan al estado general de los mismos.

En este mismo sentido, la boca en general y los dientes en particular son también afectados por este proceso, de manera que una mujer en etapa de menopausia sentirá los siguientes síntomas de manera habitual:

  1. Tonalidad cromática: A la vez que se van perdiendo estrógenos la tonalidad cromática de los dientes se van tornando amarillenta, perdiendo la lucidez y claridad del blanco impoluto que una vez pudieron haber tenido.
  2. Sensibilidad de las encías: Las mujeres empiezan a notar una mayor sensibilidad en las encías, con lo que sentirán más tanto el calor como el frío. De la misma forma la sequedad se empieza a apoderar de ellas y aparece un brillo de un color diferente.
  3. Sensación de ardor bucal: En muchas ocasiones las mujeres que se encuentran en esta etapa se quejan de que nada tiene ya un buen sabor y eso se debe a que tienen una sensación permanente de ardor en la boca que les impide saborear los alimentos.
  4. Gingivitis: Concretamente en su modalidad descamativa que se caracteriza por un retroceso de las encías dejando al descubierto la raíz de los dientes, con lo que ofrecen una imagen estéticamente negativa a la vez que se convierten en un blanco fácil para la llegada de las caries.

La mejor forma que tienen las mujeres cuando llegan a la edad de la menopausia para luchar contra este tipo de efectos es, sin duda, extremar los cuidados de su higiene bucal e ingerir gran cantidad de líquidos, preferiblemente agua.

Por ello, todos los dentistas recomiendan que el cepillado sea más exhaustivo, sin saltarse ninguno, que se utilice hilo dental e incluso que se refuerce la higiene bucal con un enjuague bucal con flúor, por ejemplo.

Con ello no se evitarán los efectos que la menopausia provoca en la salud bucal de las mujeres, pero al menos sí se podrán detener de alguna forma sus consecuencias y con ello poder llevar una vida más o menos normal.