La belleza de la sonrisa, así como su impacto ante los ojos de los demás, no puede medirse solamente con la apariencia de los dientes y las encías. Aunque son dos de los aspectos esenciales que deben tenerse en cuenta y que el paciente debe cuidar con minuciosidad, también existen otros parámetros que consiguen definir una sonrisa agradable, sincera y reluciente. Factores como la edad, el sexo, la apariencia individual, los rasgos de personalidad y las necesidades y expectativas estéticas concretas también participan en la creación de una boca perfecta.
Así pues, la sonrisa ideal también debe tener en cuenta algunas consideraciones individuales, tales como los rasgos faciales, el tono de piel, el estado de los dientes, de las encías y de los labios, así como la apariencia general de los pacientes. Además de las consideraciones oclusales y funcionales básicas en odontología, lograr la estética dental adecuada también conlleva abarcar otros aspectos que pueden influir en el diseño de la sonrisa. Y, la verdad, los avances actuales han permitido que sean los mismos tratamientos dentales estéticos los que velen por ello, o bien la cirugía ortognática. Existen opciones para edades concretas, para grupos concretos e incluso para personas concretas. En odontología estética, los rasgos individuales de cada paciente se convierten en una de las bases para elaborar una planificación de tratamiento adecuada y conseguir los resultados esperados.
La verdad, algunos procedimientos, como el aumento de tejidos blandos, se realizan especialmente para corregir dichas consideraciones especiales de la anatomía de la sonrisa. Esta intervención en concreto permite, a través de agentes de relleno dérmico, modificar aspectos como labios delgados y apariencias faciales asimétricas para así incrementar el atractivo de la sonrisa. Las modernidades de la actualidad permiten realizar este tipo de procedimientos garantizando una menor ansiedad del paciente, así como un menor dolor.
Aunque existan diferentes intervenciones de cirugía ortognática, no debemos olvidar el papel de los dientes y las encías. Sí, todas las consideraciones de la anatomía de la sonrisa son importantes, pero es recomendable tener en cuenta cuáles son las esenciales, la base de su atractivo. Por ello, en Clínica Dental Zendrera ofrecemos los tratamientos estéticos más fiables y efectivos. El blanqueamiento dental por fotoactivación o luz fría, las carillas estéticas de porcelana, las coronas de Zirconio, los implantes y las prótesis dentales son un ejemplo de ello.
Para aportar el componente artístico individual a la sonrisa, es importante que el dentista conozca las reglas, las herramientas y las estrategias básicas que implica su diseño. La estética dental sigue siendo un aspecto de lo más subjetivo, y siempre lo será. Por ello, según los rasgos y preferencias de cada paciente y las recomendaciones del odontólogo, debe escogerse el tratamiento más adecuado.