El tercer molar, más conocido como ‘muela del juicio’ es una pieza dental que suele comportar bastantes problemas cuando erupciona. Tanto es así que un estudio de la Sociedad Española de Cirugía Oral y Maxilofacial concluyó que la aparición del tercer molar tiene efectos negativos para dos tercios de la población española. Tener controlado el crecimiento de las muelas del juicio y dar una solución indicada en cada caso será la mejor manera para erradicar los problemas que pueden comportar.
A diferencia del resto de dientes definitivos, las muelas del juicio erupcionan en la adolescencia, entre los 16 y los 25 años, pudiendo no llegar a erupcionar nunca. La mayoría de problemas relacionados con su erupción tienen que ver con la falta de espacio en el maxilar. El hecho de no tener sitio suficiente en la parte posterior de la dentadura provoca que erupcionen torcidas o lo hagan empujando las otras muelas. Esto puede comportar todo tipo de problemas como infecciones, caries en los segundos molares, quistes o erosión en otras piezas, que normalmente suelen ir acompañados de un dolor intenso que es el primer síntoma de la afectación.
Además de los problemas que provocan en los dientes adyacentes, la falta de espacio produce otra situación típica que tiene incidencia en toda la dentadura. Hablamos del apiñamiento de los dientes anteriores que se produce por culpa de la presión que la muela del juicio produce hacia la parte delantera de la boca.
Prevenir estas situaciones es tarea del dentista y para poder solucionar cada caso de la mejor manera es necesario hacer un diagnóstico personalizado. La exodoncia suele ser la medida más efectiva cuando la erupción del tercer molar se produce afecciones o se prevé complicada debido a la falta de espacio. Esta intervención se puede realizar en la clínica dental o en un quirófano según la complejidad de cada caso.
En Clínica Dental Zendrera utilizamos las visitas periódicas de nuestros pacientes para anticiparnos a los problemas que puedan causar las muelas del juicio y poner remedio a su erupción para evitar cualquier complicación. La realización de ortopantomografías, o radiografías panorámicas, suele ser muy útil para comprobar la situación de dicha pieza dental y estudiar el tratamiento más indicado para cada caso.